A partir de ahora pasaremos a
referirnos a esta técnica como TC, ya que, a partir de la 6ª generación, pierde
literalmente la A, ya que pasa de ser axial a ser helicoidal...como mucho
podríamos haberla cambiado por la H, pero pasa a llamarse Tomografía
Computerizada.
Los equipos de TC, como
comentaba al comienzo, están basados en rayos X, radiación electromagnética de
alta energía, cuya interacción con los organismos vivos puede dar lugar a
efectos biológicos potencialmente dañinos.
Como técnica potencialmente
dañina, se debe llevar a cabo un estudio de su peligrosidad, y este se realiza a
partir de la dosis efectiva que es la magnitud que cuantifica el riesgo global.
Se define como la dosis absorbida (energía absorbida por unidad de masa)
multiplicada por unos factores característicos del tipo de radiación y de la
diferente radiosensibilidad de los órganos y tejidos del cuerpo. La unidad de
medición en el SI de la dosis absorbida es el Gray (Gy) y el de la dosis
efectiva el Sievert (Sv).
Las dosis recibidas por el
paciente durante una exploración de TC se encuentran entre las más elevadas de
todas las técnicas de radiodiagnóstico. En la imagen anterior, podemos
comprobar que si comparamos una radiografía de cabeza con una TC de pelvis…¡estamos
recibiendo 143 veces la dosis de la primera!...y aunque sepa como “funciona
todo esto” gracias a las clases que ya acumulamos…todavía me dan escalofríos
cuando leo:
TAC: riesgo de sufrir cáncer = moderado
Con el fin de disminuir la
aparición de efectos biológicos se deben seguir los principios de la protección
radiológica (PR) que, en el caso del paciente, corresponden a la justificación
de la ejecución de la prueba, la optimización de las dosis empleadas y el
establecimiento de unos niveles de referencia de dosis.
A pesar de que no hay
evidencias de efectos por debajo de los 100 mSv, la Comisión Internacional de
Protección Radiológica estima que este modelo es el más práctico para gestionar
el riesgo a la exposición a la radiación siendo acorde con el “principio
de prevención” (UNESCO, 2005).
JUSTIFICACIÓN
Como dice el Real Decreto, una
radiografía sólo está justificada si proporciona un beneficio neto frente al
detrimento individual que puede causar. Esta valoración debe tener en cuenta
las ventajas diagnósticas que supone así como el provecho que implica en la
salud de las personas y la sociedad. En este proceso de justificación deben
involucrarse tanto el médico prescriptor que solicita la prueba como el
especialista en radiología clínica que la va a realizar o supervisar. Ambos
valorarán la necesidad de la exploración contemplando la posibilidad de
emplear pruebas alternativas que impliquen una dosis menor o que no utilicen
radiaciones ionizantes. La decisión final, sin embargo, queda en manos del
especialista en radiología clínica (RD 815/2001).
Hay un objetivo claro con este
principio de PR y es evitar todas las exposiciones a la radiación que sean
innecesarias.
Si representamos una gráfica,
publicada por la Comisión Internacional de Protección Radiológica (ICRP), con
el porcentaje de riesgo de cáncer fatal en función de la edad y sexo,
observamos el considerable aumento del porcentaje a medida que se reduce la
edad en el momento de la exposición.
Debemos ser conscientes y
evitar malas prácticas y para ello es necesario que todas las Unidades
Asistenciales de Radiodiagnóstico dispongan de los criterios de justificación
de exploraciones radiológicas en su Programa de Garantía de Calidad.
OPTIMIZACIÓN
Para minimizar el riesgo
también es necesario tomar medidas para optimizar las dosis impartidas de forma
que sean lo más bajas posibles compatibles con la obtención de la información
diagnóstica requerida. A este principio se le denomina ALARA (tan baja como sea
razonablemente posible) por sus siglas en inglés (“As Low As Reasonably
Achievable).
ESTABLECIMIENTO DE UNOS
NIVELES DE REFERENCIA DE DOSIS
Los niveles de referencia para
diagnóstico (NRD) contribuyen a la optimización de la protección de los
pacientes procurando evitar que sean expuestos a dosis innecesariamente altas.
Su establecimiento se enmarca en el programa regular de garantía de calidad.
Para su determinación se han
realizado estudios nacionales en varios países de las dosis asociadas a las
diferentes exploraciones y se ha determinado el valor por debajo del cual se
hallan el 75% de los centros. Se ha estimado que si el 75% de los centros
pueden llevar a cabo exploraciones con una calidad adecuada con ese valor de
dosis, el 25% restante puede corregir sus equipos y/o técnicas de exploración
para reducirlas.
Además de todo esto, debemos
destacar la importancia de la FORMACIÓN ya que es el primer paso para alcanzar
los principales objetivos que persigue la protección radiológica
Con otro enfoque analizamos también
un artículo de “Desayuno con Fotones”, del que lo primero que me gustaría
destacar es la siguiente cita de Patricia Remírez:
“Si damos más valor a lo que
nos falta que a lo que tenemos, nos sentimos mal. El valor, lo que apreciamos,
aquello de lo que hablamos y compartimos con los demás, es una elección. Tú
decides si sumas o restas”.
Las siglas PECCRD hacen
referencia al Protocolo Español de Control de Calidad en Radiodiagnóstico.
Es un documento extenso y
complejo y que gracias a este artículo se hacen aclaraciones e incluso se
destapan algunas erratas. Esto es habitual en todas las normas técnicas y
reglamentos, por lo que suele ser de gran ayuda un texto (cosa que no siempre…o
mejor, rara vez, se realiza) con aclaraciones y profundización. Por otro lado
en relación a las erratas se debe actualizar y editar las nuevas versiones.
En este caso Pedro Ruiz
Manzano nos aclara varios puntos. El que más me ha llamado la atención es el
siguiente:
DE004 Distorsión, la
tolerancia debe ser +/- 10%. Y el parámetro “n” de la definición de distorsión
está mal definido. No es “el número de veces que el cuadrado mayor contiene al
menor” sino “el número de cuadrados pequeños que contiene la diagonal grande o
el número cuadrados pequeños que contiene el lado del cuadrado grande”.
Con esto finalizo la revisión
y resumen de las entradas indicadas.Libro
No hay comentarios:
Publicar un comentario